Syed forma parte de una creciente red de seguidores de Jesús de origen musulmán. Equipado y animado por un equipo de Fronteras obreros , él y sus compañeros creyentes son evangelistas apasionados.
Un día, mientras pasaba por un barrio musulmán, Syed se fijó en unas cuantas vacas que descansaban junto a la carretera. En medio de ellas, un anciano permanecía en silencio con las manos extendidas para dar de comer a esas vacas migas de pan rancio.
Con sus grandes y blandas narices, las vacas daban codazos a las pequeñas manos del anciano, utilizando los labios para arrancarle hasta la última miga de los dedos.
"¿Por qué das de comer a las vacas?" preguntó Syed mientras se acercaba al anciano.
Syed cogió las migas de pan y empezó a ofrecérselas a las vacas.
"Me gusta darles de comer", respondió el anciano.
A primera vista, el hombre parecía bastante delgado. Pensando que era pobre, Syed le preguntó: "¿Has comido hoy?".
"Oh, sí", respondió. "No soy pobre. Estoy jubilado y tengo una pensión. Esto es lo que me gusta hacer".
Cuando Syed preguntó si podía ayudar a alimentar a las vacas, el anciano sonrió generosamente.
"Toma", dijo. "Coge unas migas de pan". El anciano parecía feliz por la compañía de Syed.
Syed cogió el pan y empezó a ofrecérselo a las vacas. Se rió cuando una vaca le pasó la lengua por la palma de la mano.
"Está un poco desordenado", se rió el viejo.
Syed sonrió y asintió. Luego preguntó: "¿Conoces el Pan de Vida? Puedo compartirlo contigo".
"¿Conoces el Pan de Vida?"
"¿Qué pan de vida?", respondió el anciano.
Syed pasó un rato hablándole de Jesús. Y tras escuchar el Evangelio, el anciano pidió recibir a Cristo.
De pie entre las vacas, los dos hombres rezaron. Syed contó algunas historias más sobre Jesús y animó al anciano a contar a otros el mensaje del Evangelio.
Al día siguiente, Syed volvió a visitar al anciano en el mismo lugar. Lo encontró entre las vacas, junto con otros cuatro ancianos que querían saber más de Cristo y recibir el Pan de Vida.
- Alabado sea Dios por moverse en los corazones de los jóvenes y los ancianos para atraerlos a una nueva vida con Jesucristo.
- Pide al Señor que equipe a este nuevo seguidor de Jesús para compartir el Pan de Vida con cientos de musulmanes más.
- Orar para que Dios siga equipando a Syed y a otros creyentes de origen musulmán para que den fruto abundante para el Reino.
Una familia de Fronteras nos cuenta su aventura en el extranjero en Acción de Gracias y cuántos pollos hacen falta para un pavo.
Este relato procede de un veterano obrero. Los nombres y lugares han sido modificados por motivos de seguridad.